Agentes de la Policía Nacional y de la Guardia Civil han colaborado con la Policía de la República de Estonia en la desarticulación de la mayor organización criminal rusa dedicada al tráfico de drogas, denominada Kemerovo, con la detención en la localidad malagueña de Mijas de su máximo responsable.

En esta operación conjunta, denominada Fulcrum-Carinatus, y coordinada por el Juzgado Central de Instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, fueron detenidos de forma simultánea en Tallín (Estonia) otros tres dirigentes de esta red, asentada en ese país.

Las autoridades estonias llevaban más de dos años investigando a esta organización criminal. Pesquisas que adquirieron "una nueva dimensión" tras el asesinato, en septiembre de 2016 por un ajuste de cuentas, del máximo líder del mundo criminal ruso en Estonia, informaba ayer la Dirección General de la Policía.

Hasta su muerte, este monopolizaba el poder y era el encargado de la recepción del dinero de las distintas organizaciones asentadas en Estonia para su aportación a la denominada obshack o "caja común". Abarcaba todos los ámbitos de delincuencia y ejercía de juez entre el resto de líderes.