La Guardia Civil detuvo a cuatro miembros de una familia acusados de estafar a un varón arousano de 68 años, apropiándose de todo su patrimonio hasta dejarlo prácticamente en la indigencia. Se les acusa, entre otras cosas, de un delito contra la integridad moral, apropiación indebida y lesiones. Además, otros miembros de la familia fueron o están siendo investigados.

Las investigaciones, llevadas a cabo por el Equipo de Policía Judicial de la Guardia Civil de Tui, se iniciaron a finales del pasado año a instancias del Juzgado de Instrucción número 1 de Tui, a raíz de la denuncia presentada por el hijo de la víctima, residente en aquel momento en la comarca de Arousa.

La denuncia se formuló en agosto del año pasado, cuando el varón de 68 años ingresaba en un centro hospitalario de Pontevedra en un deplorable estado físico y mental, después de haber convivido durante los dos últimos años con los miembros de la familia detenida.

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La relación de la víctima con este clan familiar comenzó cuando conoció a una mujer de 65 años, en La Luna, discoteca de la periferia de Pontevedra. En aquel momento, iniciaron entre ambos una relación sentimental y se fueron a vivir juntos en un primer momento a Arbo y después a A Guarda.

Según fuentes de la Guardia Civil, la relación resultó ser bastante traumática para el varón por los malos tratos y las vejaciones que recibía, tanto de esta mujer como de su entorno familiar más próximo. Aun así, la mujer en cuestión habría podido ejercer el poder de seducción suficiente para apoderarse de todo el patrimonio de este hombre, utilizando para ello diversos engaños y artimañas como la apertura de cuentas bancarias a nombre de los dos, transferencias de activos a las mismas, contratación de microcréditos con diversas entidades financieras, apoderamiento de la indemnización de pólizas de seguros? De esta forma, la mujer consiguió apropiarse de un capital superior a 160.000 euros, de los que también se beneficiaron los otros miembros del núcleo familiar que fueron detenidos: dos hijos y su exmarido.

Durante el tiempo que la víctima estuvo conviviendo bajo el control de esta familia, sufrió todo tipo de vejaciones, además de violencia física y psicológica. Según se desprende de los testimonios recogidos en el marco de la investigación, el hombre sufría castigos en los que la familia le impedía comer durante varios días, alimentándolo de pan y agua, e incluso le llegaron a romper las gafas de lectura para que no pudiese leer los documentos que le obligaban a firmar.

Además de la detención de la mujer, C.M.R.L, de 65 años, vecina de A Guarda, como principal responsable del entramado familiar, fueron arrestados su expareja, M.F.P., de 70 años y dos hijos, C.F.R., y R.A.F.R., de 43 y 46 años respectivamente, acusados de participar en los mismos hechos, de los que también se beneficiaron económicamente. Del mismo modo se procedió a la investigación de un nieto de la señora, D.M.F., de 25 años, actualmente en prisión provisional acusado de un robo con violencia en Ponteareas, y de su novia N.M.S., de 25 años, vecina de Mos.

Actualmente, la víctima, que ha sido diagnosticada con una grave demencia senil, se encuentra ingresada en una residencia geriátrica donde le han tenido que gestionar la apertura de nuevas cuentas bancarias para que pueda volver a cobrar las pensiones de jubilación a las que tiene derecho.

Tanto los detenidos como los investigados han sido puestos a disposición del Juzgado de Instrucción número 1 de Tui y, posteriormente puestos en libertad con cargos.