Si bien semejaba a raíz de las últimas operaciones antidroga que la vía marítima volvía a ser la preferente por la bandas de narcos a la hora del trasvase de la mercancía y posterior distribución, el medio terrestre vuelve a ser otra vez escenario de uno de los mayores golpes antidroga asestados en la comunidad.

Y es que el ajillo de 64 kilos de heroína incautado en una nave de Caldas, además de suponer la mayor aprehensión de esta sustancia en Galicia en lo que va de año, fue trasladada al municipio pontevedrés a través de varios camiones sin ningún tipo de disimulo, ya que según pudo saber este periódico, la droga no iba oculta en otros productos o mercancías.

El operativo fue desarrollado por la Policía Nacional en colaboración con la Udyco de Pontevedra y A Coruña además del Servicio de Vigilancia Aduanera. Al frente del mismo, el Juzgado de Instrucción número 1 de Vigo. Tras el paso a disposición judicial de los once detenidos, entre los que figura un vilanovés con varios antecedentes por narcotráfico -J.J.Ventoso Padín-, varios arousanos y al menos dos búlgaros, los magistrados (Instrucción 1 e Instrucción 8, en funciones de guardia) ordenaron el ingreso en prisión provisional sin fianza para todos, tal y como confirmaron fuentes del TSXG.

El fiscal antidroga de Pontevedra Pablo Varela había solicitado previamente para todos ellos prisión preventiva.

Según pudo saber este periódico, los narcos gallegos, en su mayoría arousanos, contaban con una infraestructura encargada de recibir la mercancía por parte del clan búlgaro, que sería el supuesto encargado de proporcionársela. Esta entrega tendría lugar en la nave del polígono industrial de Caldas de Reis, sin embargo fue frustrada por los agentes que procedieron a las detenciones en pleno intercambio de la droga.

Por el momento la causa continúa abierta, secreta y se sigue por un presunto delito de tráfico de drogas. Tanto el delegado del Gobierno den Galicia, Santiago Villanueva, como la subdelegada en Pontevedra, Ana Ortiz y el fiscal antidroga, calificaron esta aprehensión de "importantísima". "Es un duro golpe al narcotráfico que entra en Galicia y que se distribuye en otros puntos. Impide que esta droga llegue a la calle y evita problemas de salud", relataba Santiago Villanueva.