La Guardia Civil de Lugo investiga a un ciclista de 73 años que cuadriplicó la tasa de alcoholemia en la carretera LU-120, en el lugar de Muimenta, en el ayuntamiento de Cospeito. Una vez finalizada la actuación, el conductor, que se enfrenta a una multa de 1.000 euros, abandonó el lugar andando, con la bicicleta en la mano para, "según sus propias palabras, ir a tomar una copa a un local de hostelería próximo", según explica el instituto armado en un comunicado de prensa.

Los agentes hallaron al septuagenario "absolutamente errático e irregular", por lo que lo sometieron a un test de alcohol, que arrojó un resultado de 0,99 miligramos por litro de aire expirado.