"Muy tranquila". Así describía el abogado de Rosario Rodríguez, Manuel Meiriño, el estado de su defendida ante el juez de Ribeira Nº1. Tras permanecer durante dos horas y media ante el magistrado -respondió a todas las preguntas-, ha quedado libre sin medidas cautelares, pero continúa como investigada en el proceso sobre Diana Quer.
La mujer de El Chicle facilitó en un primer momento coartada a su marido cuando fue interrogado en 2016 por la desaparición de la joven madrileña. Casi 500 días después de aquel fatídico 21 de agosto, Rosario decidió dar marcha atrás y se derrumbó para confesar que aquella noche su marido no había estado con ella. Él siempre estuvo en el punto de mira de la Guardia Civil, pero la declaración de su esposa lo mantuvo protegido.
Al quedarse solo, El Chicle confesó que él fue el autor de la muerte de Diana, pero relató un atropello accidental. Ahora, la autopsia preliminar ha tumbado esa versión y descarta absolutamente que las lesiones del cuerpo sean compatibles con un atropello.
La comparecencia de ambos en el juzgado se ha resuelto de manera diversa. Ella ha contestado a todas las preguntas del magistrado; él ha vuelto a guardar silencio.
