El papel de Rosario Rodríguez, esposa de El Chicle, en el caso Diana Quer todavía tendrá recorrido judicial. Los padres de la joven madrileña, personados en la causa como acusación particular, han tomado ya la decisión de recurrir el auto del titular del Juzgado de Instrucción número 1 de Ribeira en el que se acordó el sobreseimiento provisional de las actuaciones con respecto a esta mujer. Quien no formulará recurso contra esa resolución será la Fiscalía. Fuentes del Ministerio público afirmaron ayer en que "por ahora" coinciden con el juez en que "no hay indicios de delito penal" contra la pareja del autor confeso de la muerte de Diana. "En caso de que durante la instrucción aparezcan pruebas o indicios nuevos se valoraría pedir la reapertura", ahondaron.

El recurso contra el auto judicial dictado este martes que exonera a Rosario puede ser de reforma ante el mismo juzgado -que con toda probabilidad se ratificaría en la decisión ya adoptada- o de apelación ante un órgano superior, en este caso la Audiencia Provincial de A Coruña. El instructor sobreseyó la causa contra Rosario al no apreciar indicios de su participación como autora o cómplice en los delitos por los que se investiga a su marido. Distinta es la cuestión de su papel como encubridora, pero con respecto a este ilícito están legalmente exentos de pena, como es el caso, "los encubridores que lo sean de su cónyuge".

Juan Carlos Quer, padre de Diana, viajó ayer a Galicia, concretamente a Ferrol, donde se ubica el despacho de Ricardo Pérez Lama, abogado que ejerce la acusación en representación del padre y la madre de la fallecida. "Se tomó la decisión de recurrir el auto de sobreseimiento", confirmó el progenitor de la fallecida a las puertas del bufete, donde, con toda probabilidad, tuvo también la oportunidad de analizar con el letrado otras cuestiones relativas al proceso judicial.

Este hombre regresaba ayer a la comunidad gallega tras la dura y dolorosa jornada del jueves, en la que su hija recibió sepultura en Madrid. En Ferrol quiso reiterar su "agradecimiento al pueblo gallego y a los ciudadanos españoles por el interés y afecto mostrado" hacia la joven. "Me preocupa que nuestra sociedad a partir de ahora sea una sociedad más segura, ése sería el interés de mi hija", dijo. Su máximo deseo es que "se adopte frente a este señor -en referencia a José Enrique Abuín Gey- una resolución judicial a la altura del crimen que ha cometido".

¿Cuál fue la razón de que el juez sobreseyese la causa contra Rosario apenas una semana después de incluirla como investigada en el procedimiento? Por un lado no aprecia "en el momento actual" indicios suficientes respecto a su participación "como autora o cómplice" en los delitos imputados a su marido -detención ilegal, homicidio o asesinato y contra la libertad sexual-.

Aunque inicialmente la mujer reiteró ante la Guardia Civil que estaba con su marido la noche del 21 al 22 de agosto de 2016, la de la desaparición de Diana, ya en condición de detenida se "retractó": admitió que no estuvo con su marido, sino que permaneció en su vivienda. El juez ve esta versión corroborada por los datos de su teléfono -que la sitúan en la casa-, por las declaraciones de su hermana y su cuñado que también la sitúan en el inmueble precisando que estaba "en pijama" y por los informes forenses que apuntan a que Abuín Gey actuó solo.

Sin responsabilidad penal

Como encubridora sí hay indicios, pero está exenta de responsabilidad penal. Tuvo una "participación activa" en "desviar" las investigaciones policiales que se dirigían a su marido y "tenía sospechas" de él ya que le preguntó "a menudo" si tenía algo que ver con la desaparición de Diana. El juez no pasa por alto que su conducta "podría ser moralmente reprobable", pero el Código Penal la exculpa, concluye, por ser esposa del investigado.