José Ramón Prado Bugallo, Sito Miñanco, considerado por las fuerzas de seguridad uno de los mayores capos del narcotráfico en Europa, abandonó ayer por la mañana la cárcel pontevedresa de A Lama, a petición de la propia prisión tras suspenderse el juicio por blanqueo, en la Audiencia de Pontevedra, camino de la cárcel de Alcalá Meco en Madrid
Sobre las 12.30 horas llegó al penal coruñés de Teixeiro, donde estaba previsto que pasara la noche para continuar viaje hoy en conducción ordinaria a Madrid, previo paso por el centro penitenciario de León. Sito Miñanco pasó la noche en la enfermería de Teixeiro pues nada más llegar sufrió un amago de desfallecimiento. Y es que el narco cambadés prosigue la huelga de hambre que comenzó el pasado 24 de febrero al llegar a A Lama para denunciar lo que considera un trato vejatorio.
Miñanco continúa en control extremo de primer grado y en aislamiento. Una situación que su abogado, Gonzalo Boye, ya ha anunciado que recurrirá. El letrado se mostraba ayer muy preocupado por el estado de salud de Miñanco, pues arrastra algunos problema y lleva ya once días en huelga de hambre.
