El Supremo ha confirmado la condena a tres años de cárcel y 90.000 euros de indemnización que la Audiencia de Alicante impuso a la directora de una residencia de Torrevieja (Alicante) que se quedó con decenas de miles de euros de un anciano ingresado en la misma para comprarse un Jaguar.

La Audiencia impuso a Ignacia I.B. por un delito continuado de apropiación indebida agravado por la cuantía, una pena, atenuada por dilaciones indebidas, de tres años de prisión. Le impuso también la citada indemnización, que tendrá distintos beneficiarios porque el anciano ha fallecido.

Los hechos ocurrieron en 2003 y años posteriores. En ese año la directora de la residencia geriátrica 'Los Jardines de Clara', a favor de la cual había hecho una amplia cesión de poderes notariales el anciano, vendió unas parcelas que eran propiedad de éste por 54.000 euros y, "con parte de este precio, 36.000 y pico según propia declaración, la acusada adquirió un vehículo marca Jaguar".

Así lo relata la sentencia en sus hechos probados, que cuentan también cómo se sucedieron en meses posteriores nuevas ventas de parcelas y apropiación de dinero. El anciano falleció en mayo de 2004.

En la cuenta corriente de la que era co-titular la acusada junto a su víctima, ella ingresó el dinero procedente de la venta de inmuebles, pero luego, "sin contar con la voluntad de aquel", realizó una disposición a su favor del importe, añade la sentencia.

De este modo, "debe entenderse cometida la apropiación indebida al haberse incorporado de modo definitivo al patrimonio de la recurrente una cantidad de dinero que no era de su propiedad", concluye el Supremo.