La Guardia Civil procedió a la detención del responsable de un concesionario de vehículos en Cangas, J.G.P. en la denominada operación Ñagra, por presuntamente defraudar algo más de 640.000 euros mediante una doble financiación de vehículos que matriculaba y vendía y que podría haber afectado a unas 70 personas. El empresario, que está acusado según la Policía Judicial, de estafa, falsedad documental, revelación de secretos y alzamiento de bienes, quedó en libertad con cargos.

Junto al detenido, la Guardia Civil confirma que también tomó declaración, en calidad de investigados, a la actual responsable del concesario, un comercial y a otra persona, vecina de Cangas, que resultó tener varios préstamos a su nombre con vehículos registrados por este concesionario. Todo apunta a que la Policía Judicial decidió incluirla como investigada porque no había denunciado al empresario, como hicieron otros clientes.

Según la Policía Judicial, los autores del delito falsificaban la documentación aportada por los clientes para obtener financiaciones fraudulentas fingiendo la compra de otros vehículos, cometiendo así, presuntos delitos continuados de estafa y de falsedad documental. La investigación realizada por la Policía Judicial de la Comandancia de la Guardia Civil de Pontevedra, concluyó que los clientes acudían a comprar un vehículo al concesionario y, al gestionar su adquisición, el administrador copiaba la documentación del comprador para después utilizarla en otras operaciones de financiación sobre el mismo vehículo en otras financieras diferentes. La otra modalidad de estafa, tal y como señala la Guardia Civil, consistía en utilizar los datos personales del comprador para solicitar la financiación de otro automóvil. De esta forma resultaron afectados por las estafas, no solo los compradores, vecinos de O Morrazo, sino también los titulares de los vehículos para los que pedía la financiación.