Agentes de la Policía Nacional detuvieron el pasado sábado a nueve personas, todas ellas de nacionalidad alemana y de entre 19 y 42 años, tras presuntamente provocar escenas de pánico en un convoy de la Línea 3 de Metrovalencia, al que entraron con gritos de "arderéis en el infierno"; "sois todos pecadores y vais a morir" o "este tren está lleno de alcohol, droga y pecado".

Los hechos sucedieron sobre las 22.45 horas del pasado sábado en un metro de la Línea 3 de Metrovalencia, entre las estaciones de Xàtiva y Alameda, en el centro de la ciudad. Los ahora detenidos supuestamente accedieron al vagón en la estación de Xàtiva, con mochilas, panfletos de su religión y una cruz de metro y medio. Allí, de una manera, "muy escandalosa", según relataron los testigos a la Policía, las nueve personas presuntamente profirieron gritos a través de un megáfono.

La situación generó escenas de pánico ya que los viajeros se asustaron, e incluso una mujer sufrió una herida en un pie en una estampida al parar el tren en Alameda, donde bajaron. La Policía acudió al lugar alertada por llamadas de los ocupantes del convoy y ya estudia las imágenes facilitadas por Ferrocarrils de la Generalitat Valenciana (FGV) para proceder a la investigación. Los detenidos, que profesan la religión evangelista, pasaron el domingo a disposición judicial como presuntos autores de un delito de desorden público, según confirman fuentes de la Jefatura Superior de Policía.

Se trata de un delito recogido en el artículo 557 del código penal y que acarrea penas de entre 1 y 6 años de prisión en caso de producirse en «manifestaciones numerosas», como sería el caso del metro, según las fuentes consultadas. El juzgado de Instrucción número 6 de València, en funciones de guardia, acordó prisión eludible bajo fianza de 12.000 euros para cada uno de los detenidos