La Guardia Civil ha detenido a diecinueve personas en las provincias de A Coruña y Lugo por al menos 120 robos con fuerza y violencia en viviendas y locales.

El martes los agentes detuvieron a once personas en A Coruña en el marco de la Operación Tanunoi y a ocho más en Lugo, en la Operación Telefunken.

La investigación arrancó en enero en Noia, cuando fueron denunciados múltiples robos con fuerza, que se extendían por toda la provincia hasta el área de Santiago y Melide o Betanzos.

Una parte del grupo, según explica la Guardia Civil en un comunicado, abandonó la zona y trasladó su actividad a la provincia de Lugo, en torno a la capital y en las comarcas de Terra Chá y Ulloa.

Los ahora detenidos supuestamente pasaron de los robos con fuerza a los robos con violencia, al perpetrarlos de día e incluso con los moradores de las viviendas en el interior.

Tras averiguar que vendían los objetos robados a un residente en Santiso, que los almacenaba para luego revenderlos, por lo que se le imputa un delito de receptación, el martes la Guardia Civil cerró la operación.

Fueron 160 agentes los que participaron en la operación y lograron esclarecer 120 robos con fuerza y violencia, además de recuperar numerosos efectos, pendientes de que sus propietarios los reclamen.

La Guardia Civil aclara que la investigación continúa abierta, con diligencias tramitadas por el juzgado de instrucción número uno de Arzúa, y no descarta nuevas detenciones.