Un guardia civil falleció en la madrugada de ayer en Granada al ser disparado con su propia pistola por un delincuente habitual, con el que mantuvo un forcejeo tras darle el alto durante un control rutinario en la localidad de Huétor Vega.

Los hechos ocurrieron sobre las 4.20 horas cuando el guardia civil, de 47 años, y una compañera en prácticas realizaban un control rutinario. Tras interceptar a un vehículo que circulaba a gran velocidad e identificar a su único ocupante, se produjo un forcejeo entre el guardia civil y el detenido, que antes de huir arrebató el arma al agente y le disparó en la zona baja del abdomen. Huyó, pero horas después fue detenido.

El agente, que formaba parte de una patrulla en servicio del municipio de La Zubia (Granada), resultó gravemente herido y fue trasladado al hospital, donde murió. La detención del presunto autor de los hechos, de 40 años y delincuente habitual con antecedentes por violencia machista, robo y amenazas, tuvo lugar a las 09.25 horas de ayer en el entorno de un centro comercial en la capital granadina al volante de una furgoneta robada.