Los accidentes de tráfico mortales no dejan de sucederse en las carreteras gallegas. La cifra en lo que va de 2018 ya se sitúa en unos noventa fallecidos en Galicia, muy superior a los 76 de todo 2017. El viernes, un día después de la muerte de un joven de 23 años en Sada, hubo otro siniestro en Boqueixón en el que perdió la vida el conductor de un vehículo, de 56 años y vecino de la también localidad coruñesa de Touro. La víctima iba sin cinturón de seguridad.

El siniestro se produjo en la carretera DP-1201 y consistió en una salida de vía del turismo por margen izquierdo, con posterior choque contra un árbol, informa la Guardia Civil.