Un delito de asesinato, otro de coacciones/acoso, uno más de vulneración de la intimidad y finalmente, un delito leve de hurto. Estos son los delitos que atribuye el Juzgado de Violencia sobre la Mujer de Vigo a César Adrio, acusado del crimen de la joven ingeniera coruñesa Ana Enjamio en diciembre de 2016. La víctima recibió 28 puñaladas. La jueza concreta estos ilícitos en el auto en el que decreta la apertura de juicio oral contra este vigués de 40 años, que había tenido una relación sentimental con la chica, a la que conoció en la empresa en la que ambos trabajaban en Porriño. En la misma resolución la instructora requiere al encausado, separado y con dos hijos, para el pago de la fianza de cara a asegurar las responsabilidades pecuniarias (multas y/o indemnizaciones) que pudieran imponérsele en caso de condena: fija esta cuantía en 450.000 euros, cantidad coincidente con las indemnizaciones que pide la Fiscalía para los padres y el hermano de la víctima.

Este auto supone el fin de la instrucción y el último paso antes de elevar la causa a la Sección Quinta de la Audiencia Provincial de Pontevedra, donde se celebrará el juicio con jurado popular, para el que aún no hay fecha. Adrio permanece en prisión provisional desde su detención tras el crimen acusado de cuatro delitos. El primer de ellos, que cita la jueza, es el de asesinato con "alevosía" y "ensañamiento", con la concurrencia de dos circunstancias agravantes: la de parentesco y la de razones de género.