Seis de los 21 procesados, entre los que figuran varios que han cumplido condena por tráfico de drogas, y que mantenían contactos con Toledano han sido absueltos por el tribunal, algunos de ellos porque aunque intentaron hacer negocios con el cabecilla de la organización desmantelada por el Greco Galicia, no culminaron ningún acuerdo con él pues no tenía barcos suficiente para atender todas las peticiones que recibía para transportar alijos por vía marítima.

Uno de los condenados a nueve meses como cómplice, expuso durante la vista oral en alusión a Toledano, según recoge la sentencia: "Yo quería la embarcación grande y no me la dio, me toreaba". Y es que según el fallo del tribunal, ante la falta de barcos Toledano no se negaba a trabajar con ellos, pero les iba dando largas con diferentes excusas por más que intentasen concertar con él el transporte de cargamentos de hachís en favor de ellos mismos o de su propia organización, por lo que no han sido acusados.

El fallo distribuye a los condenados en dos grupos distintos, el liderado por el Peque, que participó en el transporte de la cocaína a Vigo, y el capitaneado por Lorenzo Toledano, que tenía apoyos importantes en la costa de Almería para introducir alijos de hachís. Entre los condenados, además de los pilotos de planeadoras y yates, está su chófer.