Un joven de 20 años considerado por la Guardia Civil un "peligroso agresor sexual" fue detenido por efectivos del Instituto Armado de Noia dentro de un operativo denominado operación Mint y enviado a prisión por el juzgado de guardia. Al joven se le imputa una agresión sexual cometida a principios del año 2017 en Padrón, ciudad donde al parecer residían tanto víctima como agresor, así como un abuso sexual a otra mujer el pasado verano, según fuentes de la Benemérita. En el primer caso, calificado como delito de agresión sexual, "abordó a su víctima con gran violencia y utilizando un cuchillo", por lo que la mujer necesitó más de seis meses hasta recuperarse de los daños físicos, según ha trascendido en las últimas horas.

La Guardia Civil ha abierto una minuciosa investigación sobre estos hechos, de los que apenas se han facilitado más datos, para esclarecer la autoría de los mismos. Los investigadores han encontrado, en ambos casos, las pruebas biológicas necesarias para imputar los dos delitos a la misma persona, según informa el Instituto Armado en un comunicado. El joven fue detenido en la comarca del Sar el jueves como supuesto autor de los sendos ataques a mujeres, el primero tuvo lugar a principios de 2017 y un abuso sexual a otra mujer el pasado verano. Tras ser puesto a disposición judicial y comparecer ante el juez, este ordenó su inmediato ingreso en prisión provisional sin fianza. Ahora la investigación prosigue por si existen otros casos y más víctimas que no hayan denunciado los hechos. De ahí el secreto y la discreción que pesan sobre esta causa.

Los investigadores de la Guardia Civil que buscaban al agresor de las dos mujeres desde el primer ataque, hace casi un año, destacan la juventud del supuesto agresor sexual, y también la violencia con la que actuaba.