Una discapacitada psíquica de 37 años, Lorena Uría Uría, perdió la vida el pasado viernes en un centro especial de Sarria, en Lugo, al atragantarse con un polvorón. El personal del centro avisó con premura, según explicaron sus allegados, a los servicios sanitarios de Emergencias, que, una vez en el lugar de los hechos, no pudieron hacer nada para reanimarla.

La mujer fue enterrada en la tarde de ayer en la localidad de A Pontenova, donde residía su familia. El fallecimiento de esta mujer se une al caso de Thiago, el pequeño de tres años que falleció atragantado con una uva la pasada Nochevieja en Gijón.

La mujer fallecida llevaba algunos años internada en el Centro de Atención de Personas con Discapacidad Psíquica de Sarria. No ha trascendido el grado de autonomía que tenía esta mujer. Deja a su madre y una hermana, esta también con problemas psíquicos, aunque reside en la localidad lucense de A Pontenova. La madre se encontraba en otra ciudad española y hubo de regresar de forma urgente.

La muerte de Lorena Uría ha dejado impactados a los miembros del personal del centro, que vieron impotentes cómo la mujer se ahogaba sin que pudiesen hacer nada y sin que los servicios de Emergencias pudiesen llegar a tiempo para salvarla.

El caso del niño de tres años ocurrió en el domicilio familiar en presencia de su madre, su hermano mayor, su tío y su abuela, que nada pudieron hacer por evitar el atragantamiento. El pequeño llegó con el pulso muy débil al hospital y aunque lograron sacarle la uva con la que se atragantó, no pudo recuperarse y falleció poco después pese a los denodados intentos del personal sanitario.