La Guardia Civil abrió diligencias e investiga por delito de homicidio imprudente al conductor del vehículo deportivo de alta gama que la madrugada del domingo se salió de la vía en la carretera PO-405, a la altura de la localidad pontevedresa de Arbo y muy cerca del paso fronterizo con Portugal, y se precipitó desde casi 20 metros de altura hasta impactar contra las vías del tren. Este joven portugués de 33 años, F.M.E.D., que dio positivo en la prueba de alcoholemia, resultó herido leve, pero el copiloto, M.D.R., de 34, falleció por las graves lesiones sufridas debido a la fuerte colisión. El siniestro mantuvo casi seis horas cortada e interrumpida la circulación por la vía férrea. Con este accidente mortal se elevan a cinco los fallecidos en los viales gallegos desde que arrancó 2019, dos de ellos en la provincia de Pontevedra.

La alerta por el siniestro de Arbo se produjo minutos después de las cuatro de la mañana. Los jóvenes lusos viajaban en un Audi R-8 cuando, a la altura del kilómetro 0,800 de la PO-405, se salió de la vía, impactó contra un muro y el guardarraíl y salió despedido desde unos 20 metros de altura hasta caer sobre la vía férrea, justo a la entrada de un túnel. El 112 movilizó al 061, a la Guardia Civil de Tráfico y a los bomberos de Ponteareas. Cuando llegaron estos últimos efectivos el conductor ya estaba fuera del vehículo -al parecer lo abandonó por su propio pie, aunque el 112 apuntaba a que había salido despedido- y el copiloto, que falleció por el impacto, estaba atrapado. Los bomberos abatieron el techo para excarcelarlo y posteriormente lo subieron hasta la carretera, una labor que según relataron fue "bastante complicada" debido a la altura desde la que había caído el vehículo.

Dada la proximidad con el país vecino, en el dispositivo también participaron medios lusos, concretamente los bomberos de Melgaço y la GNR. Asimismo, acudieron técnicos de Adif. El corte de la vía férrea afectó a varios convoyes. Una vez concluyeron las labores de los servicios de emergencia y se retiró el vehículo accidentado, ya por la mañana, la circulación pudo ser restablecida.

La víctima mortal fue trasladada al Hospital Nicolás Peña de Vigo para la realización de la autopsia, mientras que el conductor fue evacuado al Hospital Álvaro Cunqueiro de Vigo para ser asistido de las lesiones que presentaba. Fuentes de la Guardia Civil confirmaron que dio positivo en alcohol y que se le investiga penalmente por un delito de homicidio por imprudencia. Las diligencias serán entregadas en el juzgado de guardia de Ponteareas, partido judicial al que pertenece el municipio de Arbo.

Heridos en Pazos de Borbén

El accidente de Arbo fue el más grave, pero no el único registrado ayer en Galicia. Uno sucedió de madrugada en Pazos de Borbén, también en la provincia de Pontevedra, al colisionar dos turismos. Según el 112, un particular avisó de que el siniestro se produjo en la carretera de O Porriño, en Cepeda, y que uno de los vehículos dio varias vueltas de campana y acabó precipitándose por un barranco. El 061, según informaron fuentes de este servicio, trasladó a tres personas en ambulancia asistencial al Hospital Fátima de Vigo: dos mujeres de 31 y 46 años y un hombre de 55.