Una mujer y su hija convivieron con el cuerpo de su madre y abuela, respectivamente, durante meses en un chalé del municipio malagueño de Istán. Fuentes cercanas a la investigación han confirmado que el cadáver fue descubierto por los agentes oculto bajo un colchón de plástico y unos cartones, con ropa de calle puesta y algunos ambientadores vacíos alrededor. La hija de la fallecida confesó los hechos después de que el exmarido de la difunta lo descubriera y advirtiera de que había que contar lo sucedido.

La Guardia Civil se ha hecho cargo de la investigación. Los agentes que acudieron a la vivienda comprobaron que el cuerpo de la mujer estaba ya momificado. La fecha en la que murió la mujer y el motivo de la muerte de la mujer, de unos 70 años, forman parte de la investigación del instituto armado. La casa se encontraba muy sucia y los vecinos habían percibido malos olores pero no imaginaban el motivo.

Los investigadores no encontraron signos de violencia por lo que las pesquisas tratarán de conocer tanto el motivo como la fecha exacta de la muerte de la mujer, de nacionalidad británica.