Culpable de un delito de asesinato consumado, otro en grado de tentativa y dos intentos de homicidio, además de un delito de tenencia ilegal de armas. Sin atenuantes porque no consideran probado que el violento delincuente vigués José Luis Luna Pereira, que tiñó de sangre la noche de San Juan en la playa de Arealonga en Chapela en 2017 estuviera ebrio, drogado o presentara algún problema mental. En apenas nueve horas el jurado popular emitió su veredicto en la Sección Quinta de la Audiencia con sede en Vigo y prácticamente por unanimidad en todos sus puntos.

Cuatro hombres y cinco mujeres consideraron probadas todas las acusaciones del Ministerio fiscal, que solicitó tras el veredicto penas que suman 42 años de prisión, así como 30 años de alejamiento, una vez cumplida la pena, del acusado respecto a la familia de Daniel Beltrán, y 20 años de alejamiento de la víctima que resultó ilesa. La acusación particular, ejercitada por la familia del joven asesinado, pidió 25 años, la pena máxima, por el asesinato, además del mismo tiempo de alejamiento que el fiscal y 2 años por tenencia ilegal de armas; así como 35.000 euros de indemnización para cada uno de sus progenitores y 28.000 para sus dos hermanos. La defensa, una vez descartado que actuó bajo la influencia de alcohol y pastillas, solicitó las penas mínimas que correspondan. El magistrado presidente del tribunal será ahora quien dicte la sentencia.