El narcotráfico sigue siendo un lucrativo negocio que en el último año ha dado un salto cualitativo, tanto por las más de 40 toneladas de cocaína intervenidas por las fuerzas antidroga en España „la mayoría en los puertos de Valencia y Algeciras„, como por el patrimonio decomisado a los grandes narcotraficantes, entre ellos importantes clanes gallegos. Auténticas fortunas siguen llegando tras las correspondientes sentencias judiciales al Plan Nacional de Drogas a través del Fondo de Bienes decomisados, integrado por efectos, propiedades e instrumentos incautados por sentencia firme, que se adjudiquen al Estado.

Galicia, con 90 incautaciones en el último año, ha pasado de ser la sexta comunidad autónoma en número de decomisos a ocupar la cuarta posición, precedida por Andalucía (645), Madrid (287) y Cataluña (138). A lo largo de 2018 ha superado a Valencia, que se queda en 80 incautaciones, y a Castilla La Mancha. La provincia de Pontevedra, con 66 bienes intervenidos (4 embarcaciones, 14 inmuebles, 2 joyas, 31 vehículos y 15 equipos informáticos) es seguida, de lejos, por la de A Coruña, que se queda en 17, mientras hay tres casos en Ourense y otros cuatro en Lugo.

Los importes ingresados en el Tesoro por el Plan Nacional sobre Drogas duplicaron los del año anterior. Así, en 2018 se ingresaron un total de 32.483.738 euros, de los que 20,3 millones procedían directamente de los juzgados como decomisos en efectivo y 11,6 millones procedían de los presupuestos de enajenación de los bienes de los narcos, bien por subasta o por adjudicación directa.

Los ingresos del Plan Nacional sobre Drogas incluyen 74.440 euros de rentas de alquileres y 9.959 euros anuales de Adega Condes de Albarei, un compromiso adquirido por la compra del Pazo de Baión, por la que abonó en su día 13 millones de euros, que incluye la contratación de toxicómanos en fase de rehabilitación en el antiguo pazo de Laureano Oubiña.

En Galicia se subastaron 4 vehículos en A Coruña, valorados en 16.900 euros, y en Pontevedra 12 inmuebles por valor de 1.515.000 euros, sólo superados por bienes subastados en Madrid por 8,5 millones de euros. En Vigo se ubica uno de los inmuebles enajenados de mayor valor: una nave valorada en 900.000 euros que se quedó la sociedad arrendataria del mismo.

También se ha disparado el número de incautaciones de embarcaciones y motores, 300 frente a 112 del año anterior. El número de vehículos intervenidos ascendió a 715 (frente 675 en el año 2017). Además, incluso se intervino una aeronave.

La Mesa de Adjudicaciones que gestiona los bienes acordó la adjudicación de 7 embarcaciones, 23 inmuebles y 78 vehículos valorados en casi 13 millones de euros cuya subasta se celebrará a lo largo de este año. Si en 2017 salieron a subasta propiedades millonarias comisadas al desaparecido José Antonio Pouso Rivas, Pelopincho, el año pasado y este se centra en grandes patrimonios como el del isleño Marcial Dorado (valorado en unos 20 millones de euros), del que ya han podido registrarse tres cuartas partes a nombre del Estado, y el del fallecido Manuel Abal Feijóo, Patoco, valorado en 50 millones y cuya adscripción al Estado todavía debe ponerse en marcha.