Cuatro policías nacionales, incluido el exjefe de la unidad antidroga de Ourense, acusados de proteger a 9 traficantes, se sentarán en el banquillo por supuesta "aquiescencia" con el trapicheo de sus confidentes. Los 13 compartirán banquillo, si bien los agentes sostienen que las pruebas contra ellos fueron "fabricadas". La llamada operación Zamburiña desencadenó un terremoto en la comisaría de Ourense en el mes de noviembre de 2015. Asuntos Internos la puso en marcha tras el robo de pistolas en el búnker, que se indaga en otro caso, y la recepción de un anónimo en noviembre de 2014 sobre una supuesta trama de corrupción policial.