El incendio forestal activo desde el sábado pasado en Gran Canaria, que afecta a unas 10.000 hectáreas, quedó estabilizado ayer, después de que en las últimas horas los trabajos de extinción y la meteorología hayan permitido avanzar en su control. El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, acudirá hoy a la isla para conocer la evolución del incendio y sobrevolará la zona del fuego para ver sus consecuencias, informó la ministra de Defensa, Margarita Robles. El Gobierno central mantiene once medios aéreos y cuatro brigadas de refuerzo para luchar contra el fuego y vigilar que no se reactive en ningún lugar.

El presidente canario, Ángel Víctor Torres, dijo ayer que la voluntad es que todos los desalojados puedan volver en las próximas horas a sus viviendas, siempre que estén garantizadas las máximas medidas de seguridad. En la mañana de ayer ya habían vuelto a sus casas la mitad de las 9.000 personas evacuadas y durante la jornada se han abierto carreteras y otros residentes han vuelto a sus domicilios. Las carreteras se abren "no para que la gente vaya de turismo", advirtió Torres.

El presidente afirmó que el flanco derecho está bajo control y que solo quedan algunos focos en el Parque Natural de Tamadaba, donde las casas forestales ubicadas en este espacio protegido no se han visto afectadas.