El hallazgo de dos gemelas de 10 años de edad que vivían en condiciones insalubres y sin escolarizar en un garaje ha indignado a Portugal, que se pregunta cómo no se descubrieron antes las condiciones en las que los progenitores, a los que se les ha retirado de forma preventiva la custodia, tenían a las pequeñas.

La polémica por este caso se alimenta cada día con los datos que se van conociendo, el último que todo se destapó por una denuncia anónima a una línea telefónica de apoyo a menores.

Fue este aviso el que permitió localizar a las niñas en un garaje de Amadora, a las afueras de Lisboa, donde vivían con sus padres en condiciones "deplorables e insalubres", según la Policía Metropolitana, que las encontró.

Estaban "malvestidas", no iban al colegio y "presenciaban agresiones físicas y psicológicas entre los padres", de 51 y 34 años, que fueron detenidos por malos tratos y llevados a interrogatorio, tras lo que quedaron a la espera de juicio en libertad con la prohibición de contactar con las menores. Las hermanas permanecen en una residencia de acogida.

Las gemelas no saben leer ni escribir y nunca fueron a la escuela porque les dijeron que les "faltaba un documento" cuando fueron a hacer la inscripción, según comentó la madre a los medios portugueses.