La Audiencia Provincial de Pontevedra ya tiene fecha para el inicio del juicio con jurado popular por el conocido como crimen de Ponte Caldelas por la muerte a navajazos en noviembre de 2015 de Manuel Rivas Muiños. Será el 14 de octubre por lo que la magistrada de la Sección Cuarta que presidirá este tribunal dispondrá de más de un mes para dictar sentencia antes de que se agote el plazo máximo de prisión preventiva para el acusado, Marcos Vidal González, pues a finales de noviembre se cumplirá cuatro años en prisión a la espera de juicio.

La fecha para el inicio de la vista oral se fijó en el auto de hechos justiciables dictado ayer mismo. Se trata de un paso que se prevé en la Ley del Jurado. En dicho auto, la Audiencia Provincial de Pontevedra excluye cualquier participación en los hechos de la mujer del fallecido, Sandra M. A. y se centra únicamente en si Marcos Vidal González acabó con la vida del marido de esta a cuchilladas y con ensañamiento, tal y como defiende el fiscal.

El escrito de acusación de la Fiscalía solicita que se le imponga al acusado una pena de 20 años de prisión y la prohibición de acercarse a la viuda de Manuel Rivas durante 25 años. Además, solicita una medida de libertad vigilada durante ocho años tras el cumplimiento de la condena.

El escrito de acusación de la Fiscalía sostiene que Marcos Vidal mantuvo una relación sentimental con Sandra M.A., quien estaba casada con el fallecido. De hecho, el matrimonio llegó a cesar en su convivencia durante un mes pero finalmente terminaron por reanudarla. Sobre las siete de la madrugada del 28 de noviembre de 2015, Marcos Vidal supuestamente se desplazó desde Arcade a Ponte Caldelas. Tras comprobar que Sandra había dormido allí con su marido, sorprendió a este cuando salía del domicilio y lo introdujo dentro, asestándole 15 cuchilladas. Luego, dice el fiscal, tomó el móvil de la víctima y le hizo una foto todavía con vida que envió a Sandra, y finalmente lo remató con una cuchillada en la espalda. Luego fue a su casa, se cambió y regresó a Ponte Caldelas desde donde avisó al 112, relató lo que acababa de hacer y se entregó a la Guardia Civil.