Un interno que se encontraba en régimen de tercer grado en el centro penitenciario de Pereiro de Aguiar (de los que salen a trabajar o a actividades formativas y regresan cada noche a dormir) pasó hora y media fugado, este jueves, tras saltar un muro de unos dos metros de altura, una división que limita el patio de sección abierta con el aparcamiento de visitas.

El preso, de Verín y 30 años, que estaba cumpliendo hasta 2022 casi nueve años por varias ejecutorias de delitos contra la salud pública, amenazas y lesiones, abandonó el centro para hacer una actividad formativa. La junta de tratamiento de Pereiro decidió su regresión a segundo grado.