Policía Nacional y Guardia Civil detuvieron a tres personas, a raíz de un hurto cometido en una joyería de Pontecesures. Se trata de "un grupo itinerante especializado en cometer hurtos en comercios utilizando en algunos casos a menores de edad, de 7 y 9 años, para acceder a sitios pequeños y angostos, o para despistar a los empleados".

Tras el hurto en la villa pontecesureña, por valor de 30.000 euros, comenzó la búsqueda de varias personas que se dieron a la fuga en un vehículo. Fueron detectadas en Pontevedra, procediendo a identificarlas y comprobar que una utilizaba documentación falsa. Resultó ser alguien con "numerosas requisitorias judiciales de diferentes juzgados españoles". Se comprobó, también, que otro individuo llevaba dos fajos de billetes, uno de 880 euros y el otro de 90, mientras que en el vehículo había joyas, algunas con la etiqueta aún puesta.