La Guardia Civil investiga la violenta muerte de un vecino de 55 años de A Regada en Mos, cuyo cuerpo fue hallado ayer por la mañana con varios golpes y en ropa interior en el camino de A Tomada, junto a su casa. Se trata de una pista rural que da acceso a tres viviendas, incluida la suya, a escasos 50 metros de la N-550 en una tranquila pero poblada zona rural.

Un particular alertaba sobre las diez de la mañana de ayer de la presencia del cuerpo en la vía pública. La Guardia Civil, que realizó una inspección ocular del lugar, investiga el suceso como un homicidio. El levantamiento del cadáver, por orden judicial, tuvo lugar sobre las 13.00 horas y fue trasladado al Hospital Nicolás Peña de Vigo donde a lo largo de esta misma mañana se le practicará la autopsia.

La investigación apunta que se trata de un caso extraño de explicar, ya que hallar un cadáver en calzoncillos en plena vía pública es poco habitual. Los investigadores tratan de esclarecer si al hombre le mataron en su propia casa, o bien él vio llegar a los agresores y trató de huir, siendo alcanzado ya en el exterior por un vehículo que podría haberle arrollado. Lo que si parece estar claro es que los agresores iban directamente a por el fallecido.

De momento el Instituto Armado mantiene abierta todas las hipótesis, incluido un posible ajuste de cuentas, si bien no es la única línea de investigación en la que se trabaja. El fallecido, al parecer, había tenido vinculación con el tráfico de drogas hace años y tendría antecedentes policiales.

Agentes de la Policía Judicial se desplazaron ayer por la tarde hasta la vivienda de la víctima para la inspección ocular y la toma de muestras. Tras la señalización en el camino del lugar donde apareció el cuerpo, buscaron rastros en la finca que puedan ayudar a esclarecer lo ocurrido.

La casa en la que residía el hombre asesinado está en un alto a pocos metros de la N-550 en una zona bastante habitada, aunque la parte de atrás llega hasta una zona de monte. La Guardia Civil cerró ayer el camino de A Tomada, que mantiene precintado, al igual que la vivienda del fallecido, que sigue custodiada por los agentes.