La justicia sigue la pista a una vecina de Pontevedra que parece haberse especializado en estafas en la contratación a nombre de terceros de distintas líneas telefónicas.

Según confirman fuentes judiciales y policiales, esta mujer, vecina del barrio de A Seca, acumula ya al menos dos sentencias condenatorias y otros muchos casos abiertos en el juzgado por este tipo de fraudes que se convierten en un auténtico quebradero de cabeza tanto para las víctimas como para los propios investigadores.

Condenada ya en el pasado a doce meses de prisión por estafa y seis meses por falsedad documental, R.S.S., pesa ahora de nuevo una acusación de la Fiscalía de Pontevedra por un delito de estafa y falsedad en documento mercantil, acusada de haber contratado de nuevo dos líneas de teléfono móvil a nombre de una vecina de Pontevedra que nada tiene que ver con ella y que denunció cuando comenzó a ser requerida por las compañías telefónicas para que efectuase los correspondientes pagos. La acusada no solo no abonó el coste del servicio, sino que se apropió de los dos smartphones que las compañías le enviaron a su domicilio y que ella recogió suplantando la firma de la víctima.

Su modus operandi es casi siempre el mismo. La mujer obtiene de alguna forma los datos del DNI de algún tercero y lo utiliza para dar de alta una línea de teléfono, contrato que normalmente lleva consigo el envío de algún teléfono móvil de alta gama. Aunque la mujer utiliza los datos de identificación de una tercera persona, en la dirección de los paquetes aparece la de su domicilio en el barrio de A Seca, en donde recibe estos teléfonos, los dos últimos valorados en 481 y 1.223 euros, respectivamente.