Pasadas las dos de la mañana, las fuerzas y cuerpos de seguridad terminaron la descarga del material que había en el narcosubmarino, que dos grúas izaron al muelle de Aldán (Cangas). En total, se han contabilizado 148 fardos de cocaína que continenen casi 4,5 toneladas, lo que lo convierten en uno de los mayores alijos intervenidos en Galicia.
Dentro del sumergible, que ha sido trasladado a la Escuela Naval de Marín, no ha aparecido ningún aparato sotisficado de navegación. Ni siquiera un sónar. Solo una pequeña brújula y una suerte de timón instalado en el suelo. Con estos instrumentos, los tripulantes cruzaron el Atlántico hasta la costa gallega.
Tampoco aparece el depósito de combustible, que se sospecha se haya desprendido por todo el movimiento al que se ha sometido al narcosubmarino intentando reflotarlo. Las maniobras se extendieron a lo largo de más de quince horas, hasta que por fin a la una de la madrugada, las fuerzas del orden conseguían acceder a su interior, con la presencia judicial, para hacer el registro y verificar la cantidad de droga.
Los dos detenidos ecuatorianos, Luis Tomás B.M. y Pedro Roberto D.M, fueron localizados con el rostro y las manos manchados de hollín a modo de camuflaje. La titular del Juzgado Número 1 de Cangas, Sonia Platas, les tomó declaración y seguidamente dictó auto de prisión comunicada y sin fianza, imputándoles delito de tráfico de drogas en una cantidad de notoria importancia.
Sigue todavía fugada una tercera persona, todavía sin identificar y de la que se sospecha que es de origen gallego, incluso vinculada a la comarca de O Morrazo.
