Un grupo de vecinos de La Línea de la Concepción recibió el 25 de marzo con insultos y hasta a pedradas al autobús en el que 28 ancianos llegaban huyendo del coronavirus desde una residencia de Alcalá de El Valle donde se habían producido muchos contagios. La investigación policial sobre ese incidente ha culminado con nueve detenidos que fueron los que lideraron la protesta.

La policía vincula a esos nueve hombres, según ha podido saber El Periódico de Catalunya de fuentes de la investigación, con el grupo de 'Kiko el fuerte', uno de los capos del hachís en Campo de Gibraltar, y el entorno de otro hombre conocido como 'el cabra'. Ambos son, según fuentes policiales, "narcotransportistas", personas que traen la droga, la descargan y la almacenan en lo que llaman "guarderías" o "caletas".

"Los detenidos forman parte de esas cuadrillas. Viven en El Zabal y La Atunara, por la calle Canarias, en San Bernardo... Son gente conocida y forman parte de los escalones más bajos del tráfico de drogas", aseguran fuentes que investigan el narcotráfico en el Campo de Gibraltar.

Entre los nueve detenidos tras los incidentes hay hombres que figuran como investigados por la policía por haber hecho de 'puntos', el escalón más bajo del tráfico de hachís en la zona. Un punto es alguien que a bordo de una motocicleta y con un teléfono móvil patrulla las calles y avisa de dónde está la policía y la guardia civil para que las descargas de hachís puedan hacerse de forma segura. "Ganaban entre 600 y 1.000 euros por noche", subrayan fuentes policiales.

Otros de los detenidos por apedrear al autobús de los ancianos habían subido ya un escalón. La Policía y la Guardia Civil los habían investigado ya en ocasiones anteriores por formar parte de "cuadrillas de descarga" de la droga, personas que ya tocan el material, que ganan más dinero y arriesgan también más.

Sucesor de 'los castañas'

'Kiko el fuerte' fue detenido por la Guardia Civil en noviembre, dentro de la operación Fortín contra el tráfico de hachís. Entonces se le atribuyó un patrimonio de unos 20 millones de euros y se afirmó que había sustituido a 'los castañas' (los hermanos Antonio e Isco Tejón, encarcelados después de que uno protagonizara incluso un videoclip de reggaetón) como el principal capo del hachís en la zona de La Línea. Es un hombre de 45 años, amante de las pesas y el culturismo y que puso varios gimnasios en la zona. En enero, quedó en libertad sin fianza porque la jueza no vio acreditada su vinculación con un alijo de hachís. Para la Guardia Civil y la Policía Nacional, que lo investigan, constituye un objetivo prioritario.

La policía sostiene que el móvil de la protesta contra la llegada de los ancianos sospechosos de ser portadores del Coronavirus fue "erigirse en protectores del barrio. Su mensaje con esa acción fue: vienen a traernos a gente contaminada, nadie hace nada, pero nosotros velamos por la salud del barrio"; es decir, buscan legitimidad y penetración social, lo mismo que hacen financiando equipos de fútbol o dando trabajo o pagando alguna operación médica a alguna persona.

En los vídeos difundidos sobre la protesta, uno de los manifestantes discute con un policía: "¿A qué vienen, a que nos infecten a nosotros? La vamos a liar, lo estás grabando? Para que lo sepas. Y no solo nosotros. Si vienen más infectados a La Línea, se va a echar todo el mundo a la calle". El hombre añade: "Llevamos quince días haciéndolo todo bien, todo el mundo encerrado. Y ahora, ¿que nos van a traer a los otros infectados, muertos en el autobús? ¡Que vienen muriéndose en el autobús!". Otro de ellos llega a hacer alguna alusión al trapicheo de drogas en su discusión con los agentes: "Después con el narcotráfico...", apunta.