El Grupo de Información de la Agrupación de Tráfico de la Guardia Civil (GIAT) busca a los dos ocupantes del vehículo que huyeron tras impactar con otro en la antigua carretera de Extremadura, en Móstoles, un accidente en el que han muerto tres personas de una misma familia y otra se encuentra herida de gravedad, han confirmado a Europa Press fuentes de la investigación.

El siniestro entre los dos vehículos ha tenido lugar sobre las 1:45 horas de este lunes a la altura del kilómetro 20 de dicha carretera. Tras la colisión, el coche peor parado, que iba a gran velocidad, ha salido de la vía estrellándose contra un árbol y una farola.

Tras la llamada de un taxista, al lugar de los hechos se han desplazado una dotación de la Guardia Civil, Policía Local, Policía Nacional, y los servicios médicos del Summa-112.

A su llegada encontraron a ese vehículo con cuatro personas en su interior. Los sanitarios han confirmado la muerte de tres de ellos por severas contusiones: un varón de 30 años, una mujer con una edad similar y la de una niña pequeña. Se trata de una madre, su hija y el cuñado de la primera.

Una niña de 12 años, única superviviente

La única persona superviviente es una niña de 12 años, también hija de la mujer, que fue rescatada por los Bomberos de la Comunidad tras arduos trabajos y luego trasladada al Hospital 12 de Octubre, donde ingresó en estado grave, tras sufrir varias fracturas en los tobillos y en la tibia. Su estado de salud actual se desconoce porque la familia no ha dado autorización para informar sobre ello, aunque no se teme por su vida.

El otro coche siniestrado ha sido hallado volcado en la carretera a varias decenas de metros del otro vehículo. Sus dos ocupantes, quien podrían ser también familiares o allegados de los fallecidos, han huido del lugar por la A-5 dirección Navalcarnero.

Los agentes están realizando una intensa búsqueda para encontrarlos. Se desconocen los motivos de la fuga. Las primeras investigaciones y testimonios de varios testigos apuntan a que el choque no fue frontal, por lo que no se descarta que la colisión fuera intencional o fruto de una carrera o persecución.

Familiares de los fallecidos, de etnia gitana, han acudido este lunes a las puertas del Instituto Anatómico Forense y esta tarde se han concentrado para interesarse por lo ocurrido a las puertas de una de sus viviendas, situado en el barrio de Palomeras Sureste, en el madrileño distrito de Puente de Vallecas.