Un joven de Alcúdia (Mallorca) de 29 años había encontrado un filón en las bicicletas y patinetes eléctricos. Se metía en garajes comunitarios o en los portales de edificios de toda la isla y se llevaba estos vehículos, muchas veces de alta gama, y que vendía posteriormente. Agentes de la Guardia Civil de Artà le arrestaron finalmente, acusado de unos 80 de estos robos en los últimos meses, con un botín estimado en 85.000 euros.

La Guardia Civil inició la investigación a finales de verano, tras detectar en su término municipal varios robos de bicicletas de alto valor, todos mediante el mismo modus operandi. El ladrón se introducía en garajes comunitarios y bien en zaguanes y portales de edificios. Todos los indicios apuntaban a que se trataba del mismo autor, y que su objetivo eran siempre bicicletas y patinetes eléctricos.

Los investigadores examinaron otras denuncias similares y descubrieron que en toda Mallorca se había registrado una oleada de robos con las mismas características. Llegaron a la conclusión de que el individuo que buscaban podría estar detrás de unos 80 robos de bicicletas en los términos de Artà, Santa Margalida, Pollença, Alcúdia, sa Pobla y es Pont d’Inca.

Durante la investigación los guardias localizaron en Palma a una persona que tenía a la venta varias bicicletas que coincidían con algunas de las sustraídas, y que había adquirido a un joven de 29 años residente en Alcúdia.

Finalmente, el pasado jueves la Guardia Civil puso en marcha un dispositivo en el que participaron agentes de Artà y Santa Margalida, en el que fue detenido el presunto ladrón y se intervinieron seis bicicletas de alta gama, una de ellas valorada en 9.000 euros, así como cuatro patinetes eléctricos y diverso material y herramientas de ciclismo.

Los investigadores calculan que las 80 bicicletas sustraídas tendrían un valor total de 85.000 euros. Los vehículos recuperados ya han sido entregados a sus propietarios.