Susto en el aeropuerto de Alicante-Elche al aterrizar de emergencia anoche un avión procedente de Bristol. El piloto detectó que había un problema en los frenos y procedió a activar el protocolo de emergencias.

Hasta la pista se trasladaron varios vehículos de bomberos nada más producirse el aterrizaje del avión, de la compañía Ryanair, que fue más despacio de lo normal. Al parecer, los frenos se habían recalentado y había riesgo de incendio, según informaron fuentes cercanas al suceso.

Los bomberos pusieron una especie de ventiladores en dirección a los frenos para disminuir el calor y los pasajeros tuvieron que esperar para poder desembarcar.