La Guardia Civil ha detenido esta madrugada en la provincia de Cádiz a once personas dentro de una operación contra el blanqueo de capitales procedentes del tráfico de hachís, que se ha desarrollado como continuación de otra intervención culminada el año pasado con 91 detenidos y la incautación de nueve toneladas de esa droga.

La directora general de la Guardia Civil, María Gámez, ha explicado en rueda de prensa que los detenidos son testaferros de los narcotraficantes y ha subrayado la necesidad de atacar el "corazón" de estas redes a través de sus recursos financieros y sus beneficios económicos.

Con la operación de esta madrugada, denominada Lodos y continuación de la del año pasado bautizada como Barros, se han desarticulado seis grupos criminales dedicados al blanqueo de capitales y liderados por presuntos narcotraficantes afincados en la Bahía de Cádiz y el Campo de Gibraltar, según Gámez.

La intervención, incluida en el Plan Especial de Seguridad para el Campo de Gibraltar puesto en marcha por el Ministerio del Interior en 2018, ha supuesto la detención de 106 personas y el bloqueo de un patrimonio cifrado en 2,5 millones de euros.

Los narcotraficantes utilizaban personas de su entorno para titularizar bienes muebles e inmuebles, y con el dinero blanqueado habrían comprado nueve chalets, un adosado, tres pisos, un garaje y distintos vehículos de gama alta.

Al menos 15 registros

Se han efectuado quince registros en las localidades de Algeciras, La Línea de la Concepción, San Roque y Chiclana de la Frontera, todas de la provincia de Cádiz, y se ha incautado una pistola, abundante documentación y 150.000 euros en efectivo, parte escondido en un zulo hecho en un cuarto de baño de una vivienda.

"Nuestro objetivo es consolidar la respuesta de la Guardia Civil frente al fenómeno del narcotráfico y sus delitos conexos en el Estrecho de Gibraltar y el resto de territorios mencionados para responder a los nuevos retos, seguir desmantelando organizaciones criminales e intervenir sus recursos y activos económicos financieros", ha subrayado Gámez.

En este sentido, ha dicho que "de nada sirve" incautar una embarcación dedicada al narcotráfico si se deja a la organización con recursos económicos para comprar otra.

La directora general ha recordado que en la Operación Barros se detuvo a 91 personas y se incautaron nueve toneladas de hachís en las costas de Huelva y Cádiz; se logró arrestar también al líder de la organización, apodado Potito, que junto a su lugarteniente tenían dos personas de su máxima confianza.

Estas personas se encargaban de ejecutar sus órdenes y gestionaban de manera directa las labores logísticas de abastecimiento de las embarcaciones utilizadas supuestamente para el traslado de la droga y servían de nexo entre los miembros de la organización afincados en Chiclana y los del Campo de Gibraltar.

En esta operación han participado más de 200 agentes bajo la dirección del Juzgado Mixto número 2 de Chiclana de la Frontera y la Fiscalía antidroga de Cádiz.