Uno de los pedófilos más buscados por la justicia estadounidense pasó una temporada en Oviedo impartiendo clases de inglés en una academia mientras cuerpos de seguridad de todo el mundo trataban de dar con su paradero. Agentes de la Guardia Civil detuvieron el pasado 22 de septiembre en Barcelona a G. O. O., un vecino de Nueva York de 64 años que poco antes de sentarse en el banquillo de los acusados en 2012 por intercambiar abundante material pedófilo halló en la capital asturiana el punto de partida de una huida de casi una década por distintos puntos de la geografía europea.

El fugado fue detenido en 2010 a raíz de una importante operación contra el tráfico de material pedófilo, se encontraba en arresto domiciliario y cuando por fin iba a ser juzgado logró deshacerse de su pulsera de localización y cruzar el Atlántico. Su primera parada fue Oviedo, donde repartió currículums limpios de cualquier tipo de antecedente, logrando un puesto como profesor en una academia de inglés.

Ante el temor de ser localizado, el prófugo de la justicia estadounidense se marchó primero a Berlín y luego a Londres. En ambos destinos siguió dedicándose a la docencia antes de trasladarse a Barcelona, donde adquirió la nacionalidad española en 2018 cambiándose el orden de los apellidos y desde donde seguía impartiendo clases online.

Gracias a las investigaciones llevadas a cabo por el equipo de huidos de la justicia de la UCO en colaboración con la policía judicial de la Guardia Civil de Cataluñael prófugo pudo ser detenido y puesto a disposición del juzgado de instrucción número 2 de la Audiencia Nacional, el cual valorará su extradición.