Un chico de diecisiete años ha sido imputado por un delito contra la seguridad vial, al ser identificado como el conductor de un turismo que fue captado por un radar cuando circulaba a 189 kilómetros por hora en la Vía de Cintura (Palma), que tiene un límite de 80 kilómetros por hora. El adolescente le había cogido el coche a un familiar con el que convive sin su permiso.

El vehículo, un Seat León, fue captado por un radar de la Guardia Civil de Tráfico a la altura del kilómetro 1,4 de la Vía de Cintura en la madrugada del pasado día 15, cuando circulaba a 189 kilómetros por hora, pese a que la vía tiene una limitación de 80 kilómetros por hora

En un primer momento y a causa de la elevada velocidad a la que circulaba, el vehículo no pudo ser interceptado. La Central Operativa de Tráfico (Cota) de la Guardia Civil trasladó el aviso a los distintos cuerpos policiales para que todas las patrullas de servicio estuvieran atentas a su localización. Sin embargo, el coche no fue localizado esa noche.

El caso quedó en manos del Grupo de Investigación y Análisis de Tráfico (GIAT), un equipo de especialistas en delitos contra la seguridad vial, que iniciaron gestiones para localizar al conductor.

Tras localizar el domicilio del titular del coche, los agentes descubrieron que quien presuntamente lo conducía aquella noche era un menor de diecisiete años, familiar del propietario, y que le había cogido el vehículo sin su permiso.

Tras reunir toda la información disponible, el pasado jueves los agentes del GIAT imputaron al menor por un presunto delito contra la seguridad vial, por superar sobradamente la velocidad máxima permitida y circular sin carné. El titular del vehículo se negó a denunciarlo por hurto, al tratarse de un familiar.

Por otro lado, tres jóvenes de entre 17 y 22 años resultaron heridos ayer por la tarde al volcar un coche cerca de Sant Elm. De ellos solo tuvo que ser hospitalizada una chica, en estado menos grave.