Aragón

Homicidios baraja la hipótesis de que la mujer que mató a su pareja en Zaragoza se defendió

La víctima recibió una cuchillada en el corazón que le provocó la muerte al instante | La Policía pospone a este martes la declaración de la detenida, que limpió el piso

Vivienda en la que se produjo el asesinato.

Vivienda en la que se produjo el asesinato. / Ángel de Castro

L. M. G.

El Grupo de Homicidios de la Jefatura Superior de Policía de Aragón está tomándose su tiempo para investigar el asesinato perpetrado el domingo por una vecina de Zaragoza a su novio. Los agentes decidieron retrasar un día la declaración de la detenida, mientras trabajan en unas pesquisas en las que la hipótesis que gana fuerza es que la joven colombiana cogió un cuchillo para defenderse de la agresión que estaba sufriendo por parte de la víctima. La pareja llevaba pocos meses de convivencia con continuas idas y venidas.

De lo que los agentes no tienen ninguna duda es de que Natalia C. C., de 36 años, es la única autora de este crimen ocurrido en el segundo piso del número 237 de la avenida Madrid, en el barrio Delicias. Las huellas en el cuchillo de cocina son coincidentes con las de la sospechosa, además de que, en el momento de su arresto, ésta se encontraba sola en interior del piso que okupaban y estaba limpiando el suelo. Lo que trataron ayer los policías fue reconstruir el asesinato con las pruebas intervenidas y los vestigios recopilados por la Policía Científica.

Todo mientras recibían el informe de autopsia remitido por el Instituto de Medicina Legal y Ciencias Forenses de Aragón (Imlcfa) en el que dos especialistas certificaron que la cuchillada que recibió Sliman Guiz, argelino de 26 años, fue certera en el corazón. De ahí que fuera imposible salvar su vida, pues los sanitarios tan solo pudieron dar paso a la comisión judicial para levantar su cadáver.

El asesinato se produjo poco antes de las 10.00 horas cuando los gritos procedentes del domicilio en el que vivían ambos dejaron paso al silencio. Los vecinos llamaron a la sala del 091 que activó a una patrulla de la Brigada de Seguridad Ciudadana para comprobar qué era lo que estaba pasando y si, como parecía, podía estar ocurriendo algún tipo de violencia machista. Y es que los residentes de este edificio apuntaron a que una voz femenina pedía auxilio.

Pero no era la primera vez que el 091 recibía un aviso de que algo extraño estaba ocurriendo en dicha vivienda. De madrugada, acudieron al piso para ver qué pasaba pues se escuchaban insultos, amenazas y golpes, así como ruido de movimiento de muebles. Les abrió la puerta la ahora detenida, quien le dijo que había discutido con su pareja sentimental, que le había pegado, pero que ya no estaba en el interior de la vivienda. Se había marchado tras dar un fuerte portazo.

Los agentes realizaron una inspección de la vivienda para corroborar lo afirmado por Natalia C. C., además de ofrecerle asistencia o la posibilidad de interponer denuncia, si bien ella rebajó la importancia del episodio que acababa de vivir. Ante ello, la patrulla continuó realizando sus labores. Este hecho previo es el que lleva a Homicidios a considerar que el asesinato se habría producido en el regreso, horas después, de Sliman Guiz y de una nueva pelea con trágico final.

No obstante, no había denuncias previas por violencia machista o doméstica previas. El único antecedente lo tenía la víctima y era por una reyerta entre compatriotas el pasado mes de agosto.

La familia de la víctima está a la espera de que el juez acuerde la entrega del cadáver, mientras Natalia C. C., pasó su segunda noche en los calabozos a la espera de que hoy por la mañana le tome declaración Homicidios. Por la tarde podría pasar a disposición del Juzgado de Instrucción número 3 de la capital, en funciones de guardia.