El Ministerio del Tiempo termina su tercera temporada mañana con un homenaje a TVE sin saber si el ente público volverá a apostar por una serie que acumula cerca de 50 reconocimientos nacionales e internacionales, entre ellos dos premios Iris a la Mejor Serie.

Onza Entertainment y Cliffhanger, responsables de la producción, agradecieron ayer a TVE en una nota "la confianza en la serie y su apuesta por un producto de calidad (...) que se ha convertido en un ejemplo de internacionalización de los contenidos de la cadena", si bien fuentes de La 1 confirmaron que, por el momento, no se expresó la intención de renovarla.

El Ministerio del Tiempo se ha convertido en uno de los principales éxitos de la cadena en la opción de visionado A la carta y se ha expandido en formatos como novela, cómic, libros de análisis, realidad virtual y juegos de mesa, además de convertirse en un fenómeno en redes sociales con unos activos ministéricos.

"Ha conformado un universo transmedia y un fenómeno de seguidores únicos hasta ahora en España", recuerdan las productoras creadoras de una serie que "destaca por unir dos conceptos esenciales: entretenimiento y divulgación cultural, con la Historia de España como compañera". Destacan, en su comunicado, que El Ministerio del Tiempo es la única serie que ha ganado dos Premios Ondas consecutivos como mejor ficción española, además de otros como Iris, Fotogramas, MIM, FestVal, Feroz, Zapping y, fuera de España, otros en China y Estados Unidos.

El último capítulo, para el que se convoca a los ministéricos a "una gran quedada catódica y virtual para comentar el episodio con el hashtag #MdT3Final", se emite el mañana a las 22.40 horas en La 1 con el título Entre dos tiempos. En él se recordará Historias para no dormir y momentos emblemáticos de aquella TVE, ya que los agentes se enfrentarán a su misión más comprometida: evitar que el ente público produzca una serie titulada El Ministerio del Tiempo en 1966, en la que se cuentan misiones reales emprendidas por la patrulla de Alonso, Julián y Amelia.