- ¿En qué ha cambiado Alba Reche tras su paso por 'Operación Triunfo'?

-Ha cambiado en que ahora tengo más confianza sobre el escenario. Antes subía y trabajaba, sobre todo, en el plano musical. Ahora también hago un esfuerzo personal mucho más grande. Antes también lo hacía, pero ahora el trabajo personal antes de salir al escenario es mucho más currado.

- ¿Qué tiene 'OT' de show televisivo y qué de academia para jóvenes cantantes?

-La parte que más me interesaba era su función como academia. La otra parte es la que conlleva el estar en un programa de televisión. Sin embargo, de academia tiene mucho porque, al final, dentro se te olvida que estás en un programa de televisión. No al 100%, pero tú vas, tienes unas clases, tienes un horario, tienes un trabajo que sacar... Entonces, realmente, vas a recibir formación de canto de profesores que a mí me han ayudado muchísimo, sobre todo con los aspectos técnicos y a la hora de ponerte encima de un escenario y cantar.

- Decía Kurt Cobain "que la música sea el alimento del amor". ¿Cómo se encuentra el equilibrio entre cantar desde el corazón y controlar la voz, la presencia escénica, incluso la coreografía?

-Yo creo que la parte técnica es un trabajo que tienes que llevar hecho de antes. Entonces, en cuanto te subes al escenario, tienes que implicar todo lo demás.

- Sin que se te olvide la parte técnica...

-La parte técnica yo creo que es como un rodaje, tiene que estar tan mecanizado que no tengas que pensar en ello. Si te lo estás currando durante un tiempo y entrenas lavoz para usar una técnica determinada, cojas la respiración donde tienes que cogerla, etcétera, puedes implicate emocionalmente sin que tu cuerpo olvide la parte técnica.

- Es una mujer combativa, no solo sobre el escenario. Un asesinato por violencia machista cada dos días en lo que llevamos de año. ¿Cuáles cree que son las batallas más urgentes y más necesarias del feminismo?

-La visibilidad, es decir, el hecho de que nosotras estemos tan empoderadas como para ayudarnos unas a otras y decir: Tú no quieres denunciarlo, porque tienes miedo, pero yo voy a ayudarte, porque, si te sientes acompañada, a lo mejor ese miedo disminuye.

- ¿Qué planes tiene para el próximo 8 de marzo? ¿Contamos con usted?

-Sí, por supuesto. Antes formaba parte de una asamblea feminista y se van a juntar en Valencia, como todos los años. Yo, seguramente, ya estaré viviendo en Madrid. Pero quiero bajarme a mi tierra, donde todos los años he ido al 8M y participaré en la manifestación, obviamente. Ese día quiero dar voz, es decir, ser un altavoz más, entre todas las chicas que nos vamos a juntar y participar de forma multitudinaria en la manifesta-ción. Entre todas, porque es un día de todas.

- En el programa se ha conseguido visibilizaral colectivo Lgtbi. ¿Cómo cree que se debe combatir la homofobia?

-Yo creo que con la normalización. Eso es lo que más duele, porque, cuando tratas algo de normal, mientras que otros lo tratan de excéntrico, provoca que les choque. Cuando tratas con educación algo en lo que están invadiendo tu privacidad, tu intimidad, tu sexualidad, se están metiendo con algo que tú eres. Primero, lo normalizas, y no atacas, sino que respondes. La normalización es lo que más les preocupa. Yo es que soy muy contestona en estas cosas, no me callo nada, pero porque no creo que tenga nada que callarme. Ven como tema tabú tu orientación sexual y no lo es. Mientras no se dañe a nadie, no debería haber problema.

- ¿Qué vamos a encontrar en su futuro disco?

-No sé si va a haberlo. Yo estoy trabajando en ello, porque dedico tiempo a mis canciones en general, y si no sale ahora porque me firman un single... Por ahora no puedo decir ni que sí ni que no. Me gustaría fusionar lo que soy ahora con la música con la que me he criado.