En un principio solo era un puente. Los romanos construyeron un viaducto sobre el río Lérez en su Vía XIX entre Braga y Lugo. Pero ya en el medievo la villa iba a ser un punto importante en el "camino". Es la capital del Camino Portugués a Santiago y por ello de visita obligada la iglesia de la Virgen Peregrina. Pero su esplendor se exhibe en la basílica de Santa María, construida por el poderoso gremio de mareantes en el inicio de la modernidad. Se trata de un templo gótico de fachada plateresca, una labrada joya de piedra que habla del grandioso poder de sus marineros.

Pontevedra tienen un amplio e importante patrimonio que el turista más curioso siempre sabe valorar. Un paseo por su casco antiguo, el mejor conservado junto al de Santiago de Compostela, también no sllevará hasta el convento de San Francisco, en A Ferraría, también gótico, más sobrio pero hermoso y regio, que respira autenticidad espiritual. Santo Domingo, ábsides de la iglesia gótica del siglo XIV construida extramuros, está en ruinas pero aún manifiesta majestuosidad.

Encontrar los restos de la muralla, los miliarios que indicaban la ruta romana o visitar el museo provincial que conserva, por ejemplo, la mejor colección de originales de Castelao, siempre es una satisfacción para el visitante y sus vecinos.