Disfrutando al máximo de la libertad y de la tranquilidad de la que goza desde que el pasado mes de febrero obtuvo el tercer grado penitenciario y cambió la cárcel de Brieva por su Vitoria natal, Iñaki Urdangarin está aprovechando para compartir con su familia el día a día al margen del foco mediático. De lo más relajado, en esta ocasión vimos al marido de la Infanta Cristina de paseo junto a su madre, Claire Liebaert, por las calles de la ciudad demostrando la maravillosa relación que existe entre madre e hijo. Ambos muy cómplices y cercanos, caminaron agarrados del brazo disfrutando del paseo y del tiempo que, después de los casi tres años que el exduque de Palma pasó en prisión, por fin están recuperando.

Durante la jornada, Urdangarin también se reunió con su hermana Lucía, su marido y sus hijos, con los que estuvo muy cercano. Como muestran las imágenes, el exjugador de balonmano está en un momento muy bueno de su vida, en un discreto segundo plano mediático, completamente al margen de los constantes rumores del posible regreso del Rey Juan Carlos a España tras la publicación de su controvertida biografía.

Todos con un look muy cómodo, aprovecharon la jornada para ponerse al día y compartir confidencias como cualquier otra familia unida y feliz. Pero ha sido llamativa la ausencia de la Infanta Cristina en la cita familiar, ya que diferentes fuentes apuntaban a que este fin de semana la pareja celebraría en Vitoria su 24º aniversario de boda.

Fue el 4 de octubre de 1997 cuando la hija de los Reyes Eméritos y el por entonces jugador de balonmano del Barça protagonizaban una boda de ensueño en Barcelona. Después de años sin celebrar su aniversario por los problemas legales en los que se ha visto envuelto Urdangarin, todo apuntaba a que en esta ocasión el matrimonio se reencontraría en una fecha tan especial para ambos, pero finalmente la Infanta Cristina ha preferido quedarse en Ginebra.