El colesterol constituye uno de los grandes indicadores de riesgo de problemas de salud de los españoles, pero la gran mayoría de quienes tienen niveles elevados lo desconoce, según la Fundación Española del Corazón.

Nuestro organismo necesita esta sustancia grasa natural para su correcto funcionamiento, pero si su presencia es demasiado alta, se convierte en uno de nuestros peores enemigos, porque las células son incapaces de absorber toda la que circula por la sangre. Cuando ocurre esto, el sobrante se deposita en la pared interna de los vasos sanguíneos, como las arterias, con el riesgo de que se formen placas que puedan llegar a obstruirlas.

Una obstrucción parcial puede originar anginas de pecho, mientras que un bloqueo total causaría infartos de miocardio. Cuando esas placas afectan a los vasos que van al cerebro, el resultado son accidentes cerebrovasculares o ictus.

El termómetro de la alerta se encenderá cuando el nivel de colesterol supere los 240 mg/dL (miligramos por decilitro). Un análisis en nuestro centro de salud por indicación médica bastará para salir de dudas sobre nuestra situación.

En el caso de que los niveles de colesterol se sitúen por encima de los recomendados, existen, por suerte, formas de revertir la situación. Nuestro médico nos guiará en esta tarea prescribiendo una dieta adecuada y recomendando ejercicio físico, en función de las posibilidades de cada persona. Si fuese necesario, podría reforzar el tratamiento con fármacos.

Según la Fundación Española del Corazón, el punto clave es seguir una dieta baja en colesterol, equilibrada y saludable, acompañada de una actividad física regular.

La organización destaca en su página web la importancia de incluir los siguientes alimentos en la dieta:

-Frutas y verduras (cinco raciones al día)

-Hortalizas

-Cereales integrales

-Legumbres (tres raciones a la semana)

-Pescado azul (al menos tres raciones a la semana)

-Frutos secos

-Aceite de oliva virgen extra

Estos alimentos nos ayudarán a reducir el colesterol a la vez que a aumentar los niveles de colesterol-HDL -el llamado colesterol bueno- porque aportan ácidos grasos monoinsaturados, ácidos grasos omega-3, esteroles y estanoles vegetales y antioxidantes.

Además, habría que evitar los siguientes :

-Lácteos enteros

-Mantequilla

-Carnes grasas

-Embutidos

-Yemas de huevo

-Fritos comerciales

-Bollería industrial