Aunque tradicionalmente los biombos se utilizaban para preservarse del viento y las corrientes de la casa, actualmente ha tomado un papel muy importante en la decoración tanto en interiores como en exteriores.

A nivel general los biombos no sólo ayudan a separar ambientes sino que también pueden ayudarnos a llenar visualmente estancias con poca tapicería, a sustituir cortinas, a destacar las líneas de una pieza colocada delante de él, a reestructurar un espacio, a ganar intimidad para un rincón especial, en el exterior con enredaderas para crear paredes naturales y como no, a realizar su función inicial evitando las corrientes de aire que puedan haber en espacios abiertos.

Pero son piezas tan versátiles que permiten dejar volar la imaginación transformando su utilidad para convertirlos en elementos tan originales como un cabecero o un cuadro.

Los biombos dan mucho juego en la decoración, así que sólo hay que tener claro las necesidades de los ambientes para conseguir transformarlos con una sola pieza.