Esto va de energías. La decoración Feng Shui se centra en buscar la mejor colocación y organización de los objetos para que fluya energía positiva dentro de una determinada estancia. Y en uno de los espacios en los que esto cobra especial importancia es en el dormitorio, fundamental para gozar de un perfecto descanso y despertar con vitalidad, sin sentirnos agotados o nerviosos.

Por ello, te presentamos cinco reglas básicas de este arte oriental para colocar correctamente la cama.

Posición

En el Feng Shui está totalmente prohibido ubicar la cama justo enfrente de la puerta o bajo la ventana. Lo ideal es que su cabecera tenga detrás la pared del dormitorio que está más alejada de la puerta. También es recomendable evitar dormir reflejados en un espejo ya que según las leyes de esta superstición china, cuando ocurre eso nuestra energía vital estará toda la noche viajando.

Accesibilidad

En el antiguo sistema filosófico chino es muy importante poder acceder a la cama por ambos lados. Por tanto, evita ubicarla pegada completamente a una de las paredes.

Ausencia de cabecero

La ausencia de un cabecero de cama es según este arte oriental sinónimo de inestabilidad y falta de seguridad ante la vida. Por ello, son preferibles las camas con cabeceros sólidos y que estén colocadas en una pared en la que no haya ventanas o espejos. En el caso de que no se pueda evitar, oculta la ventana con unas buenas cortinas y tapa el espejo con una manta, sobre todo cuando vayas a dormir.

Decoración

Si tienes objetos colgantes sobre el cabecero de la cama, quítalos. En el Feng Shui este tipo de elementos no tienen cabida. Por ello, para decorar esa pared te aconsejamos que elijas objetos no muy pesados como, por ejemplo, alguna pequeña lámpara de pared. Siguiendo esta regla, descarta la instalación de ventiladores de techo sobre la cama.

Colores

Lo ideal es optar por ropa de cama (sábanas, fundas de almohada, mantas, colchas, etc.) en colores suaves y pasteles, ya que estos transmiten tranquilidad y favorecen el buen descanso. Además, se prefieren los tejidos naturales a los que son sintéticos.