La limpieza del hogar conlleva bastante tiempo y dedicación. El ritmo de vida actual hace que las horas se expriman al máximo y nos quede un tiempo reducido para limpiar la casa. Priorizar en las tareas del hogar y conseguir resultados óptimos y duraderos es una de las principales máximas en estos trabajos. Dentro de las labores más arduas en la limpieza del hogar se encuentra la de limpiar los cristales.

Mantener los cristales limpios y brillantes es un auténtico quebradero de cabeza. No obstante, existen una serie de trucos para conseguir que esta parte de nuestra casa permanezca limpia durante más tiempo.

Limpia los cristales de arriba abajo

Para ventanas extremadamente sucias, lo mejor es usar una esponja porosa y limpiar desde la parte de arriba hasta la de abajo para evitar el goteo del agua. Un paño de microfibras ayudará a pulir el vidrio cuando éste esté seco, con cuidado de que no suelte pelusa que pueda quedar pegada al cristal.

Limpia los cristales en días nublados

Las soluciones que eches a los cristales deben estar un tiempo para atrapar toda la suciedad, por lo tanto, elige siempre un día nublado para limpiar las ventanas. Si el día es muy soleado puede provocar que la solución se evapore antes de tiempo y puede dejar marcas muy antiestéticas.

Limpia los cristales con papel de periódico

Otra forma de limpiar las ventanas sin rayarlas es usar papel de periódico viejo, nunca nuevo ya que la tinta puede manchas. El papel es un truco milagroso ya que con él podrás frotar sin miedo a rayar los cristales. Además, el periódico dejará una pequeña capa invisible que hará tus cristales más resistentes a la suciedad.