Cuchara en el radiador: el truco que cada vez hace más gente para mejorarlo

En las épocas más frías del año, los edredones acaban inevitablemente en nuestra cama. Por definición, se trata de un tipo de manta capaz de retener el calor corporal durante el sueño. Sin embargo, tras varias noches utilizándola, llegará el momento en que habrá que lavarla. En efecto, el cuerpo humano desprende fragmentos de piel y sudor: al cabo de unos días, pueden propagarse olores desagradables en el dormitorio y formarse un ambiente favorable a la proliferación de gérmenes y bacterias.

Algunas personas prefieren enviar su edredón a la lavandería; otras optan por la lavadora. Sin embargo, en invierno hay un gran problema: las prendas apenas se secan porque suele hacer mal tiempo y la humedad o la lluvia lo ralentizan mucho. Así que si has lavado tu edredón en la lavadora, ¿conoces algún método para secarlo en casa? No te preocupes: hoy te desvelamos uno realmente interesante que puede dar un vuelco definitivo a tu invierno. Conocer estos trucos es algo formidable.

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Después de lavar un edredón en la lavadora, lo ideal sería utilizar una secadora para secarlo. Pero si no dispone de este electrodoméstico en concreto, debes conocer las alternativas. El mejor método es dejar tu querida manta de plumas de ganso al aire libre, quizá aprovechando un día ventoso o soleado. Si llueve, puedes utilizar un tendedero en el interior: colócalo cerca de una ventana o cerca de calefactores o radiadores (¿te has fijado alguna vez en este detalle detrás del radiador? ¡Míralo ahora!). Un pequeño truco para que el edredón recupere su volumen original: cuando lo laves en la lavadora, coloca también una pelota de tenis en el cesto. Este sencillo objeto te será muy útil y te evitará problemas.

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Para arreglar la tapicería, desaconsejamos utilizar un secador de pelo: el aire caliente del secador podría comprometer la calidad de los materiales. Si realmente quieres utilizar una herramienta de este tipo, prueba al menos a ponerla en aire frío. Volviendo a la secadora: si tienes a tu disposición este maravilloso electrodoméstico, utiliza una temperatura baja o media para secar tu edredón (¿hace siempre frío en tu casa? Resuélvelo con un simple clic). Demasiado calor corre el riesgo de dañar el tejido. Para edredones grandes, programe una hora y media, mientras que para los más pequeños bastará con 30-40 minutos. Después de media hora, recuerde siempre comprobar el interior de la secadora para ver si hay algún problema en particular. Para secar un edredón, la secadora debe tener una capacidad de al menos 7-8 kg.