El trono real de Luis XIV de Francia no siempre fue el que estaba en el Salón de Audiencias. El monarca disponía de otro 'trono' más camuflado, donde recibía a sus visitas al tiempo que podía relajar tensiones corporales y cubrir sus necesidades fisiológicas sin peder la buena cara ante sus invitados. Una réplica de esta 'joya' real puede verse en el Museo Internacional del Retrete de Nueva Delhi, junto a otras piezas como urinarios rococó, tazas victorianas o escatológicas réplicas de tronos reales.

La intención de la galería es denunciar la situación en la que viven más de 700 millones de indios, que aún carecen de accesos a los sanitarios.