El torero Francisco Rivera Ordóñez, Paquirri, se trasladó en avión al Hospital Sagrado Corazón de Sevilla "un poco por cabezonería" y para estar junto a su esposa, Lourdes Montes, en el nacimiento de su primera hija, que se llamará Carmen, y que se prevé inminente.

El torero, visiblemente emocionado, aseguró a los medios de comunicación a su salida del Hospital Quirón de Zaragoza que le dolía "todo", aunque poco a poco "va habiendo mejoría" y añadió que, si no fuera por el nacimiento de su primera hija con Lourdes Montes, "hoy sería imposible haber salido de aquí todavía".

Paquirri, que compareció ante los medios en silla de ruedas y acompañado por el doctor Carlos Val-Carreres, uno de los mejores especialistas en cirugía taurina del país, insistió en que se va, sobre todo, porque "viene Carmen", en referencia a su futura hija. En Sevilla permanecerá ingresado en el Hospital Sagrado Corazón, bajo la supervisión del doctor Salvador Morales.

Según el comunicado difundido por el hospital zaragozano, la evolución de Rivera Ordóñez ha sido "satisfactoria en las últimas horas" y las pruebas de diagnóstico por la imagen manifiestan una "franca recuperación, lo que posibilita este traslado" ante el avanzado estado de gestación de su esposa. El matador dijo que se encontraba "bien, dentro de lo que cabe", que estuvo "muy sedado" y que le han cuidado "muchísimo". Le cuesta levantarse y sentarse y su principal objetivo ahora es seguir el tratamiento y "el motivo del viaje", en referencia a su futura hija.

El torero recordó que la cornada que sufrió el pasado lunes en el primer festejo de la feria de San Lorenzo de Huesca le dolió "mucho" y que cuando se vio "las tripas fuera" pensó que era "serio". Agradeció el trabajo realizado tanto por los médicos de la plaza de toros de Huesca como del Hospital San Jorge de la capital oscense, del Quirón de Zaragoza y, en especial, a "don Carlos" (Val-Carreres), al que definió como "un ángel para los toreros".

Rivera Ordóñez insistió en que primero va "a curarse", si bien no le gustaría que este año se fuera "sin volver a torear" y que la feria del Pilar de Zaragoza "es una de las últimas oportunidades" de la temporada y que le "encantaría" estar presente, pero "dependerá de la recuperación".

"Ahora mismo quiero recuperarme y volver a torear este año, es lo que más ilusión me hace", enfatizó, aunque no puede pensar en torear "ni en Ronda ni en muchos sitios".

El doctor Val-Carreres destacó que la herida que le produjo el toro Traidor había sido "tremenda", de una extensión "enorme" porque entró por la ingle hasta las costillas del lado derecho, "amplia y extensa".

Y valoró que la recuperación del torero se ha debido en parte al buen trabajo realizado por el doctor que lo operó en la enfermería del coso oscense, Enrique Crespo. Val-Carreres, señaló que cada día "irá mejor", pero que todavía tiene que estar convaleciente.

Antes de abandonar el hospital de Zaragoza, Paquirri recibió a mediodía la visita de su hermano Kiko Rivera.