El cantante británico George Michael pudo morir debido a una sobredosis accidental de estupefacientes y alcohol, según declaró ayer su amigo de la infancia Andros Georgiou a la cadena BBC. Esta persona cercana al artista, que fue hallado muerto el pasado día de Navidad en su casa en el barrio de Highgate en Londres, explicó que Michael había comenzado a tomar "drogas duras" en los últimos años, pero rechazó la posibilidad del suicidio.

La policía británica indicó que la autopsia efectuada al cantante y compositor fue "poco concluyente", y espera los resultados de otras pruebas para determinar con más exactitud la causa de su muerte.

George Michael fue hallado sin vida en su residencia en Goring-on-Thames, población al oeste de Londres, el pasado día 25, por su actual pareja, el peluquero libanés Fadi Fawad. Se cree que Michael falleció debido a un fallo cardíaco y se ha descartado hasta la fecha que haya habido alguna circunstancia "sospechosa" en su muerte.

"Solo creo que tomó una gran cantidad de algo, que mezcló con antidepresivos y otros fármacos con los que se trataba y con alcohol. Su corazón, simplemente, dejó de latir", relató Georgiou.